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De Todo un Poco

      

                             José Cabañas González                                                                                                        Ourense, abril de 2007.

 

 

           VÍCTIMA DEL FRANQUISMO, JIMINIEGO Y PROTESTANTE.-

 

       Cuando, con la pretensión de recuperar la historia, en los modestos ámbitos locales, de quienes fueron primero masacrados y después olvidados, nos acercamos a las fuentes orales de la misma, a las narraciones de los mayores que aún conservan con mayor o menor frescura sus recuerdos, estamos siempre expuestos a que al regalárnoslos nos transmitan también con ellos sus errores. Esto es lo que durante años ha ocurrido con nuestra búsqueda del convecino Cristóbal Peñín Alonso, de quien sabíamos, porque así se nos había contado, que, siendo protestante, habría sido asesinado en los años de la pasada guerra civil en algún lugar de Verín o su comarca, donde residía.

 

       Nuestras extensas indagaciones ante reconocidos historiadores especializados en el conocimiento de la represión franquista en aquellas tierras, y en toda la provincia ourensana, y nuestras pesquisas cerca de expertos en la historia de la Confesión Evangélica en Ourense y en Galicia, no dieron jamás fruto. Y un buen día, no hace tanto, de improviso, se nos deshace el nudo del error en el que durante todo este tiempo nos vimos confinados: Don Cristóbal Peñín Alonso, tío del señor Miguel “El Panadero”, quien, con el involuntario error incluido, nos había puesto sobre su pista, no había residido en la villa ourensana de Verín, sino en la pontevedresa de Marín. Y a partir de este esclarecimiento corrió con mejor rumbo y suerte, y gracias a las aportaciones del responsable Evangélico José Luís Fernández Díaz, profesor, musicólogo y amigo, la modesta investigación por tantos años estancada:

 

       Resulta así que, según datos del libro de miembros de la Iglesia Evangélica de Marín, nuestro antiguo convecino Cristobal Peñín habría sido un destacado dirigente e impulsor de la Iglesia Evangélica en la provincia de León, en cuya capital se casó con Carmen Pais Simes en 1923, la cual era hija de quien fue profesor en las Escuelas Evangélicas de Marín y Pastor en Albacete, con la que tuvo tres hijos. Su esposa había nacido en 1904, había tomado el bautismo protestante en 1919, y falleció en  noviembre de 1930, una década que, por lo que veremos, vino a resultar fatídica para él y su familia, y cuya culminación no le permitieron alcanzar sus asesinos.

 

       Fueron hijos de nuestro paisano: Francisco, nacido en 1923, Benjamín, en 1927, y Josefina, nacida entre agosto y noviembre de 1930. Francisco falleció en Marín, a los siete años, el 16 de abril de 1930. El 28 de junio del mismo año, cumplidos los tres, fallece Benjamín. Josefina murió en marzo de 1931, sin llegar a cumplir el año y medio.

 

        En 1932 Cristóbal contrajo matrimonio civil en segundas nupcias con la prima de su primera mujer, Ignacia Simes Fernández, que había nacido en 1910 y cuyos padres eran también protestantes. El 14 de septiembre de 1937 D. Cristóbal Peñín Alonso fue fusilado, a lo que parece,  por su vinculación con el protestantismo. Se trata, desde luego, de una víctima más de las inocentes y numerosas causadas en nuestro pueblo por el oprobioso régimen franquista, de cuya vida e injusta muerte esperamos en el futuro poder ampliar nuevos datos.

 

        UN DOCUMENTO JIMINIEGO EN EL MUSEO DE LOS MONEGROS.- 

 

Hay un pueblo en Aragón, en Huesca, en la comarca de los Monegros, en la parte septentrional de la Sierra de Alcubierre, llamado Robres; tiene 709 habitantes y un Museo Etnológico construido a partir de las piezas donadas por los vecinos, conteniendo  un sinfín de objetos y utensilios que hablan de otros tiempos. También tienen en Robres, desde el pasado marzo y situado en las antiguas Escuelas, un Centro de Interpretación, Documentación y Estudios de la Guerra Civil en Aragón, auspiciado por la Comarca de los Monegros y el Gobierno de Aragón, y del que se ocupan prestigiosos entendidos en la contienda en general y en aquella tierra particularmente, investigadores del Frente de Aragón y de su ofensiva de los Monegros, como el periodista Víctor Pardo Lancina o la Profesora de la Universidad de Zaragoza Ángela Cenarro.

 

Pues bien, el que dimos en llamar “Diario en el Frente”,  publicado en el número 86 de esta Revista  y transcrito del cuadernillo o libreta hallado hace unos meses por el amigo Antonino  González en la casa de su abuela María Gordón, es uno de los documentos de interés con los que en Robres han inaugurado el citado Centro de Interpretación, que cuenta, por lo que sus responsables nos afirman, con todas las seguridades de exposición y conservación. La valía de este diario manuscrito, traído seguramente a nuestro pueblo por algún soldado jiminiego de los que entonces combatieron por aquellos frentes, posiblemente alguno de los tíos de Antonino, se concreta, según los encargados del Museo, “tanto en la cantidad de nombres que proporciona como en los escenarios que describe, en particular los concernientes  al frente de Aragón y la caída de marzo de 1938 que detalla citando la toma de cada pueblo, sobre todo en la zona de los Monegros”.

 

La cesión en depósito para su muestra  permanente ha sido hecha  a este Centro de Interpretación por Antonino salvaguardando todas las garantías identificativas, de la propiedad, y museistico-legales, de las que responde el  Consejo Comarcal de los Monegros. El Diario comparte actualmente espacio con otras interesantes aportaciones y con la Exposición “Carteles de la Guerra. 1936-1939”, que  desde el 27 de marzo al 29 de abril ofrece allí una visión equilibrada y crítica de la historia reciente de Aragón y de España. Así pues, algo de nuestro pueblo hay ya también en la alejada y bella tierra aragonesa.

( más información en http://www.losmonegros.com/guerracivil/ )

 

        OTRAS POSIBLES MANERAS DE TRATARNOS CON NUESTRO RIO.-

 

        Desde estas mismas páginas en diversas ocasiones se han alzado voces pidiendo una intervención integral en nuestro rio a su paso por el pueblo; un tratamiento conservacionista, respetuoso y adecuado; la regeneración cuidadosa de su trazado y de su cauce. El actual Equipo de Gobierno acometió por fin tales labores, rematando ya, a lo que parece, la zona que transcurre entre los puentes, y se dispone a continuar materializando su proyecto aguas abajo.

 

       Parece ser que el planteamiento concebido, que la decisión adoptada desde el Ayuntamiento, admitiría contestaciones y mejoras, que sería perfectible en las respuestas a los problemas y a los retos que con la intervención en  nuestro río supuestamente se pretenden, que tendrían cabida otras posibles soluciones, tal vez más adecuadas, menos gravosas para el entorno y para todos, de menores efectos contraproducentes y quizás irreversibles …..

 

       Se trataría, a nuestro entender, se debería de tratar, creemos, de debatir, de contrastar, entre expertos en la materia, las diferentes alternativas posibles a tener en cuenta en el procedimiento y los efectos esperables, los pros y los contras de unas y otras, tanto para la salud del río como para los intereses de los vecinos, de todos y de los  más o menos cercanos al mismo. Y próximas como están las Elecciones Municipales, creemos que el periodo previo a las mismas habría de ser el más idóneo para encarar con seriedad y provecho ese debate.

 

       Del contraste de pareceres, de la contraposición de ideas y planteamientos, de la aportación constructiva y participativa de soluciones, solo puede resultar, en un asunto de tal envergadura y trascendencia para nuestro pueblo, claridad de entendimiento de los problemas en cuestión y de la más procedente manera de resolverlos, y un enriquecimiento y mejora de la alternativa que dicho debate  muestre como  la más adecuada.    

 

           LOS BENEFICIOS DEL TURISMO CULTURAL.-

 

       Es evidente que se acercan a lo largo del año a nuestro pueblo una relativamente considerable cantidad de visitantes atraídos por los diversos alicientes que lo adornan. Este flujo de personas,  practicantes de una actividad socialmente en aumento, como es la del turismo cultural, es también un factor creador de riqueza, de creciente importancia cuando, como es el caso, las poblaciones carecen de industrias y otros sectores de actividad, o unas y otros se encuentran en declive. Ya se han apuntado a veces desde esta misma Revista variadas iniciativas que incrementarían la oferta cultural ya existente y el atractivo e interés en ser visitado, y la generación de mayor riqueza en nuestro pueblo. Con seguridad contribuiría a hacerlo en buena medida más atrayente una intervención conservacionista en nuestro río, medioambientalmente respetuosa y más regeneracionista y “natural”.  Cabe decir también que ya se vienen regularmente ocupando desde nuestro Ayuntamiento de ampliar y diversificar para todos nuestros pueblos las actuaciones que suponen incentivar que las gentes de fuera nos visiten.

 

       Creemos también evidente que son, en nuestro pueblo, los titulares de ciertas industrias y negocios quienes en especial se benefician del incremento de riqueza que el flujo de visitas representa, y lógico y jubiloso resulta que así sea. Lo que a veces se echa en falta es un poco más de implicación en potenciar situaciones que nos hagan más seductores o que difundan de mejor modo nuestro encanto, generando más visitas y aumentando consecuentemente las cuentas y beneficios de tales industrias y negocios. Y se echa a faltar también a veces desde el propio Ayuntamiento. Propiciar que nos conozcan, que se interesen por nosotros y por nuestro pueblo, que nos visiten y adquieran nuestros productos, no ha de ser considerado un gasto, sino más bien una inversión.

 

       Un privilegiado y magnífico escaparate tenemos de  nuestro Ayuntamiento: la estupenda página web que a los cuatro vientos muestra como somos y lo que atesoramos. Mejorarla en lo posible y darla a conocer no nos ha de generar más que venturas. Por lo que hace a nuestro pueblo, esta modesta Revista JAMUZ viene realizando desde hace ya mucho tiempo labor difusora de nuestras valías y peculiaridades y “patria chica” de nuestras señas en extensos y variados lugares, desde los que algún visitante que otro de vez en cuando se nos acerca. Creemos, por lo dicho, que colaborar y facilitar, tanto desde nuestro Ayuntamiento como desde las gerencias de aquellas industrias y negocios, la expansión del añejo y cuidado expositor que esta Revista representa, supone invertir para recuperar la inversión, con beneficio, a corto o medio plazo. 

 

       ( la web de nuestro Ayuntamiento: http://www.aytosantaelenadejamuz.com/  )

 

 

José Cabañas González

 

Ourense, abril de 2007.

 


 

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